Las 5 claves para preparar tu vuelta a la consulta tras las vacaciones

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Los días finales del verano se acercan, y con ellos el inevitable destino que todo profesional de la salud va a tener que enfrentar: la vuelta a la consulta tras las vacaciones. 

Este fenómeno puede despertar todo tipo de reacciones al tratarse de un enorme cambio que requiere de un proceso de adaptación. Te contamos las claves para que pases de 🌴 a 📝 de la mejor manera posible.

¿Por qué es complicado retomar la consulta después de las vacaciones?

Existen diversas razones que hacen que la vuelta al trabajo sea complicada para los médicos después de unas vacaciones. Algunos de los motivos más habituales incluyen:

1. El "síndrome post vacacional"

Tras un período de disfrute máximo del tiempo libre, es normal que a todos los seres humanos nos cueste volver al modo profesional. Especialmente durante los primeros días, adaptarnos de nuevo a un horario riguroso de consultas y tareas médicas puede resultar todo un reto.

2. Acumulación de trabajo

"Sólo de pensarlo siento un nudo en el estómago" puede convertirse en un mantra habitual antes y durante las vacaciones. Si percibes que la vuelta de las vacaciones va a suponer una cascada de historiales clínicos por actualizar, resultados de análisis por revisar y un cúmulo de citas pendientes, la sensación podría ser intensa para cualquier especialista.

3. El contraste de la vuelta

La clara diferencia que existe entre el ambiente relajado de las vacaciones y el contexto muchas veces urgente de la práctica médica no puede subestimarse. Se trata de un cambio brusco que puede resultar abrumador, y es necesario adaptarse poco a poco al ritmo y a la carga de trabajo habitual.

4. La cercanía con las personas

Aunque no lo parezca, distanciarse del ambiente colaborativo de tu consulta o clínica  puede hacer que el regreso y la reconexión con el equipo resulten más difíciles. O bien, si has disfrutado de unas vacaciones sin viajar lejos de casa, la transición a la actividad constante y al trato directo con pacientes y compañeros puede ser desafiante.

Tenemos que acostumbrarnos de nuevo al contacto con las personas con las que trabajamos, sumado al contacto con el paciente. 

5. Cuestiones personales

Aceptémoslo: las vacaciones no siempre se desenvuelven como nos gustaría. Es habitual que se generen tensiones con nuestras familias, pareja o amigos, puesto que muchas veces nos encontramos ante escenarios inesperados en sitios que no conocemos mientras el calor se apodera de nosotros. 

Ese estrés puede hacer que dejar las preocupaciones atrás se vuelva un poco más complicado a la hora de retornar a la consulta. 

Cómo hacer que la vuelta a la consulta sea más llevadera

Lo sabemos, la gestión de una consulta médica no es tarea sencilla y requiere de mucha dedicación. Pasar tiempo alejado de ella puede ser difícil, aunque lo estemos dedicando a recargar pilas para poder atender a los pacientes de forma excelente.

Por suerte, hay medidas claras que se pueden tomar para facilitar este cambio y hacer que el proceso de reincorporación a la consulta sea más llevadero.

1. Desconecta durante tus vacaciones 

Sí, puede sonar a cliché. Pero dedicarle tiempo a pasarlo bien y relajarnos es necesario para el equilibrio vital de cualquier persona. Toma la decisión consciente de disfrutar de tus vacaciones, aunque no tengas muchos días disponibles para desconectar.

Practica Mindfulness

Existen estudios sobre mindfulness en la práctica médica que muestran resultados positivos para disminuir el agotamiento de los especialistas, así como aumentar el bienestar en el trabajo. Usar técnicas de atención plena en casa durante las vacaciones es una excelente manera de disfrutar el tiempo libre y recargar pilas.

En el caso de que no puedas desatender tu consulta:

Crea un horario limitado (y cúmplelo)

Muchas veces es difícil desconectar plenamente durante las vacaciones, ya que a veces hay pruebas de pacientes u otras tareas que requieren de tu atención incluso cuando te encuentras en pleno período vacacional.

Un tip para que puedas compaginar tu tiempo libre y la atención a los pacientes es limitar el tiempo que le dedicas a estas tareas, pero concentrarte al máximo en ellas durante el horario que tú mismo puedes marcar, por ejemplo de 9 a 10 de la mañana

Si sientes mucha intranquilidad o sensaciones desagradables ante la idea de volver a la consulta, quizás es momento de revisar si estás experimentando "burn out" u otros problemas de salud mental que pueden afectar a tu desempeño en el trabajo.

👉Burnout' en médicos: Por qué no subestimarlo y cómo prevenirlo 

2. Planea tu vuelta

Planear tu vuelta a la consulta unos días antes de irte de vacaciones es esencial para volver con fuerzas renovadas y una mayor tranquilidad. ¿Y sabes qué puede quitarte un montón de dolores de cabeza? Tener una gestión de consulta automatizada

Nos referimos a la capacidad de ausentarte o irte de vacaciones sabiendo que todo permanecerá funcionando sin problemas, que tus pacientes estarán debidamente informados de cualquier novedad y que tu agenda seguirá llenándose de citas para tu regreso.

Antes de irte, asegúrate de tener un plan para ponerte al día con el trabajo y volver al ritmo de las cosas en tus primeros días de regreso. Esto podría implicar reservar tiempo para revisar correos electrónicos y tareas, delegar tareas a colegas o establecer prioridades para lo que se debe hacer primero.

👉 Cómo poner tu consulta en piloto automático

 

¿Quieres automatizar tu consulta? Compara las diferentes opciones. Ver planes

3. Tómate tu tiempo

Debido al contraste entre el descanso pleno de las vacaciones y la vuelta al trabajo, es normal encontrarse desubicado. Date tiempo para reintegrarte paulatinamente a tus actividades en consulta, en lugar de intentar manejar todas las tareas de forma simultánea.

Un tip para la transición a la rutina de forma pausada es entrar un poco antes en tu primer día tras las vacaciones, respirar hondo y dedicarle unos minutos a tu organización del espacio de trabajo. Revisa correos electrónicos, habla con tu equipo y comprueba el estado actual de todos tus procesos abiertos para así readaptarte al entorno del consultorio o del hospital antes de abordar procedimientos o consultas más complejas.

4. Pon límites

Es crucial establecer límites claros entre tu tiempo de trabajo y tu tiempo de ocio para mantener un equilibrio y sentirte revitalizado. Aunque puede ser un desafío, especialmente cuando tienes una agenda llena de pacientes y en recepción hay un flujo constante de llamadas, es esencial encontrar momentos para hacer pequeñas pausas.

Intenta planificar tu día de manera que puedas tomar al menos unos minutos de descanso entre consultas y automatiza procesos para tener una mejor calidad de vida. No olvides apartar tiempo para la relajación y el autocuidado; tu bienestar es fundamental para poder cuidar adecuadamente de tus pacientes. 

5. Usa funcionalidades avanzadas

Hay muchos procesos que puedes optimizar para quitarle carga de trabajo a tu equipo (y reducir tus preocupaciones en la práctica diaria). Piensa en implementarlas para empezar el año laboral con una ventaja importante en la gestión de tu consulta.

Programa pagos por adelantado

Ten un mayor control sobre tus ingresos con los pagos por adelantado. Los pacientes pagarán su visita en el momento de hacer la reserva para que puedas reducir el absentismo y las cancelaciones de cita a última hora.

Activa la agenda online

Si todavía estás programando citas con tus pacientes a través del teléfono, estás perdiendo oportunidades (sobre todo a partir de las 19:00 h, cuando tu equipo ya ha terminado su jornada laboral y tú no estás en consulta).

Tener una agenda online abierta 24/7 hace que tus pacientes puedan reservar cita contigo en cualquier momento del día en alguno de los huecos disponibles. 

Envía comunicaciones masivas

Comunica cualquier modificación a tus pacientes mediante un correo electrónico o un mensaje de texto. Puedes seleccionar a los destinatarios y lanzarles una notificación sobre los ajustes de horario en solo unos instantes. Por ejemplo, puedes notificarles que ya has vuelto de vacaciones y la consulta vuelve a estar abierta 😁

Conclusión

Volver a consulta tras las vacaciones de verano puede ser todo un reto, sobre todo si los procesos no están optimizados. Con las herramientas adecuadas, tu carga de trabajo y la de tu equipo pueden hacerse más llevaderas, dándote el tiempo que requieres para invertirlo en lo más importante: brindarles una excelente experiencia para tus pacientes.